PERSONAS
(ESTATUTOS PERSONALES)
Status libertatis
Fundamental distinción de los hombres era aquélla entre libres y no libres.
Los libres se llamaban "ingenui‖ si habían nacido libres y nunca habían sido
esclavos en derecho; ―libertini”, si habían nacido esclavos y con
posterioridad habían alcanzado el estado de libertad.
La libertad era definida como la facultad natural de hacer aquello que se
quería, inmune a ser impedido por la fuerza o por el derecho. Nacían libres, y
así, pues, eran ―ingenui”, los nacidos de madre libre bien que fuese ésta a su
vez libre o bien que fuese liberta. En el derecho clásico los concebidos en
matrimonio legítimo nacían libres, aunque la madre en el momento del parto
hubiera caído en la esclavitud. Con posterioridad, para favorecer la libertad
(―favor libertatis‖), se acoge el principio de que existiese o no matrimonio, el
nacido fuese libre si la madre hubiera sido libre en cualquier momento desde
la concepción al parto.
El ingenuo que hubiese caído en la esclavitud y
después se hubiera libertado de ella volvía a ser considerado como tal. A esta
condición de ―ingenui” llegaron a ser admitidos los libertos a los que el
Emperador les hubiese concedido el “aureorum anulorum‖, esto es: llevar el
anillo de oro de los caballeros y a aquéllos a los cuales les hubiera sido
atribuida la ―restitutio‖. En las Novelas justinianeas viene por fin acordado el
conceder a todos los libertos la posibilidad de alcanzar la ingenuidad.
El no-libre es el esclavo en derecho. La esclavitud tenía su principal
fundamento, en primer término, en la cautividad de guerra que hacía esclavos
a los “captivi‖. Era un elemento que el ―Ius naturale”, definía como “contra
naturam‖, porque se reconocía que por derecho natural todos los hombres
eran libres e iguales. No obstante, desde un principio hasta la edad
justinianea, la esclavitud fue siempre admitida en el mundo romano, como en
casi todos los otros pueblos de la antigüedad, y considerada plenamente
legítima según el derecho positivo.
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